dictadura militar – historiapolitica.com https://historiapolitica.com El sitio web del Programa Interuniversitario de Historia Política Thu, 30 Apr 2020 14:51:02 +0000 en-US hourly 1 https://wordpress.org/?v=6.6.2 https://historiapolitica.com/wp-content/uploads/2014/08/cropped-logo1-32x32.png dictadura militar – historiapolitica.com https://historiapolitica.com 32 32 Dossier. Represión estatal y paraestatal en la historia reciente argentina https://historiapolitica.com/dossiers/dossier-represion-estatal-y-paraestatal-en-la-historia-reciente-argentina/ Thu, 17 Aug 2017 16:08:50 +0000 http://historiapolitica.com/?post_type=dossiers&p=3652 Dossier. Represión estatal y paraestatal en la historia reciente argentina

Gabriela Águila (ISHIR-CONICET / UNR)

 

La represión estatal y paraestatal que atravesó los años 70 y tuvo su máximo y brutal despliegue en el contexto de la última dictadura militar, constituye un tema relevante en los estudios académicos sobre la historia reciente argentina. Sin embargo, y más allá de su significación como problemática convocante para los investigadores que se ocupan del pasado más cercano, referir a la represión y a sus efectos sociales remite a dimensiones que desbordan las fronteras del mundo académico.

Así, durante más de tres décadas, las demandas de memoria, verdad y justicia vinculadas a los crímenes cometidos por las fuerzas represivas en los años dictatoriales sostuvieron las acciones del movimiento de derechos humanos y, en un plano muy cercano, impulsaron recorridos judiciales no exentos de avances y retrocesos, que se centraron en la investigación de esos delitos y la punición a sus perpetradores. En directa relación con ello, ésta ha sido la principal dimensión sobre la que se configuró la memoria social dominante sobre aquellos años, evidenciando que el ejercicio de la represión y sus correlatos sociales constituye la conexión más visible entre aquel pasado atravesado por las masivas violaciones a los derechos humanos y el presente.

En tal sentido, referir a la represión estatal y paraestatal –y más en general a la violencia política de los años 70– requiere dar cuenta de una problemática compleja sobre la que existen registros, relatos, representaciones y memorias diversas, así como una “verdad histórica” sobre los crímenes de lesa humanidad, probada en los estrados judiciales a lo largo y ancho del país, que inciden y tensionan el campo de estudios específico. No es, ni de lejos –y como sucede con otros temas de la historia reciente–, materia exclusiva de la investigación académica.

Por su parte, y si bien desde los años de la transición investigadores de diversas disciplinas se ocuparon de proveer estudios sobre la dictadura e interpretar la violencia política y represiva, solo recientemente se ha consolidado una línea de estudios que ha puesto el foco en el ejercicio de la represión estatal y paraestatal, adquiriendo carta de ciudadanía en el campo de la historia reciente y mostrando una importante vitalidad.[1]

Estas indagaciones se han concentrado sobre ciertos temas y objetos de estudio, orientadas a cubrir áreas de vacancia, a dar cuenta de problemas de orden teórico-metodológico, a discutir las conceptualizaciones y a proponer nuevos abordajes sobre la problemática que complejizaran e introdujeran matices al conocimiento disponible sobre la represión y sus efectos sociales, en un proceso de renovación de las miradas que remite en parte al uso de fondos documentales hasta no hace mucho tiempo inaccesibles.

Los textos que componen este dossier constituyen un muestrario acotado de las investigaciones y aportes en la línea de estudios sobre la represión estatal y paraestatal en la historia reciente argentina. Los cruces y articulaciones existentes entre ellos son múltiples, ilustrando la riqueza de este ámbito de estudios y los fértiles intercambios que se vienen desarrollando.

El trabajo de Marina Franco se sitúa en uno de los debates centrales de esta línea de indagación, cual es el de la periodización del ejercicio de la violencia estatal en el siglo XX y en particular en su segunda mitad. Franco pone en debate la coyuntura del golpe de estado de 1976 como un parteaguas, señala continuidades y rupturas y analiza la especificidad del terror de estado en un contexto general de avances represivos, en una puntualización de preguntas y problemas que resultan claves para explicar el proceso represivo en particular y la historia reciente argentina en general.

En una dirección similar, y a la vez que se ha puesto el foco en el largo o mediano plazo, se vienen produciendo una serie de investigaciones cuyo objetivo es reconstruir y analizar en su singularidad la violencia política y represiva que antecedió a la última dictadura. Dos trabajos, los de Hernán Merele y Esteban Pontoriero, convergen en el estudio del interregno constitucional que va entre 1973 y 1976. Merele se centra en la depuración interna del peronismo y el proceso de violencia paraestatal que lo acompañó, una cuestión ampliamente conocida pero que el autor ilumina con nueva luz, al poner en suspenso interpretaciones muy difundidas sobre la Triple A y explorar en su especificidad las dinámicas de la coyuntura. Por su parte, Pontoriero aborda el estudio del principal actor represivo del período, las Fuerzas Armadas y en particular el Ejército, reconstruyendo las bases doctrinarias y operativas diseñadas para hacer frente a la “subversión” y su articulación con la legislación de defensa y el marco jurídico-normativo que se estableció en el período y operó como condición de posibilidad para la intervención militar en la represión interna.

Centrado en los años iniciales de la dictadura de 1976-83, el trabajo de Santiago Garaño sobre la prisión política pone la atención en otro problema clave en esta línea de investigación: el que refiere a las articulaciones entre las dimensiones clandestinas y legales de la represión. Su estudio revela los modos en los que se vieron involucradas agencias e instituciones estatales, como las cárceles, que actuaban según normativas, leyes y decretos emanados del poder estatal, que se enlazaron con las prácticas clandestinas, ilegales y/o para-legales que caracterizaron al accionar represivo durante la última dictadura, en un abordaje que revela la inconveniencia de miradas dicotómicas para dar cuenta de dichas dinámicas.

Otra dimensión central en los nuevos trabajos sobre la represión tiene que ver con la atención hacia el problema de las escalas de análisis. En particular, el dispar conocimiento de los mapas locales y regionales de la represión ha alentado el desarrollo de un conjunto de investigaciones situadas a escala local-regional sobre el ejercicio y las dinámicas represivas. Estos trabajos han achicado el foco del análisis hacia el despliegue de la violencia estatal en ámbitos territoriales específicos, sin perder de vista la necesidad de establecer diálogos con lo producido para otros espacios o con la “historia nacional”, y contribuyendo a complejizar el conocimiento sobre la represión implementada en distintas escalas y contextos.

En esta línea, mi contribución plantea una serie de problemas que vertebran los estudios sobre la represión, explora las continuidades y rupturas entre la dictadura y los años precedentes, los dispositivos utilizados y los circuitos represivos y el problema de las escalas de análisis, poniendo especial atención en las dinámicas regionales y locales, en las modalidades específicas del accionar represivo y las variaciones registradas en distintos espacios territoriales. Por su parte, y en una perspectiva afín, Pablo Scatizza centra su estudio en las tramas represivas desplegadas en un área relativamente marginal (una “zona fría”) en el plan represivo de las Fuerzas Armadas, la Norpatagonia, explorando tanto la inserción de las fuerzas represivas en una estrategia coordinada a escala nacional como los grados de autonomía operativa y funcional que se evidenciaron en dicho ámbito. Finalmente, el estudio de Ivonne Barragán y Ana Belén Zapata pone en diálogo dos estudios de caso, situados a escala regional y local, introduciendo unas claves de análisis cuya articulación resulta novedosa: por un lado, estudian el rol de la Armada en el despliegue represivo, por otro, vuelven sobre el problema la represión hacia la clase obrera, si bien poniendo el foco en un sector productivo específico, las empresas militares-estatales, y en el proceso de disciplinamiento y represalia hacia sus colectivos de trabajadores.

El dossier se cierra con un artículo de Valeria Manzano, que estudia la relación entre drogas y seguridad nacional en la segunda mitad del siglo XX. El trabajo se ocupa de una temática a primera vista alejada del objeto de este dossier, pero que sin dudas aporta sugerentes entradas al estudio de las dinámicas estatales en el período de mayor intensidad represiva: la definición ampliada de la “seguridad nacional” en un contexto de radicalización política y social, las continuidades y rupturas en el ejercicio represivo entre dictaduras y democracias, la escalada represiva en la coyuntura de mediados de los años 70, el rol de agencias represivas estatales como la policía, entre otros problemas que vienen ocupando un lugar medular en la línea de estudios sobre la represión estatal y paraestatal.

 

Textos seleccionados para el dossier:

Franco, Marina (2012). Pensar la violencia estatal en la Argentina del siglo XX. Lucha Armada en la Argentina, Año 8, Anuario 2012, pp. 20-31.

Merele, Hernán (2016). El germen genera sus propios anticuerpos”. La “depuración” interna peronista y el proceso represivo entre 1973-1976, inédito.

Pontoriero, Esteban (2016). «Preparativos de guerra»: Ejército, doctrina antisubversiva y planes represivos en los orígenes el terror de Estado, 1973-1976. Revista Universitaria de Historia Militar, vol. 5, nº 10, pp. 319-339. Recuperado de http://ruhm.es/index.php/RUHM/article/view/226/197.

Garaño, Santiago. (2009).Pabellones de la muerte: los límites difusos entre la represión legal y la clandestina. Entrepasados, nro. 34, pp. 33-53.

Águila, Gabriela (2013). La represión en la historia reciente argentina: fases, dispositivos y dinámicas regionales. En Gabriela Águila y Luciano Alonso (comps.), Procesos represivos y actitudes sociales: entre la España franquista y las dictaduras del Cono Sur (97-121). Buenos Aires: Prometeo.

Barragán, Ivonne y Zapata, Ana Belén (2015). Dictadura militar y represión a la clase trabajadora. La Armada Argentina, marco doctrinario y operaciones represivas en perspectiva regional para los casos de Ensenada y Bahía Blanca. Diacronie. Studi di Storia Contemporanea: Le dittature militari: fisionomia ed eredità politica, N. 24, 4. Recuperado de http://www.studistorici.com/2015/12/29/barragan-zapata_numero_24/

Scatizza, Pablo (2015). Un Comahue no tan frío. La Norpatagonia argentina en el proyecto represivo de la dictadura militar (1975-1983). Izquierdas, nº 23. Recuperado de http://www.izquierdas.cl/ediciones/2015/numero-23-abril

Manzano, Valeria (2015). The Creation of a Social Problem: Youth Cultures, Drugs, and Politics in Cold War Argentina. Hispanic American Historical Review, 95: 1, pp. 37-69.

[1] La constitución de la Red de Estudios sobre Represión y Violencia Política (RER) en 2014 (https://redestudiosrepresion.wordpress.com), la realización de jornadas y mesas temáticas en congresos de la especialidad y la publicación de un libro colectivo para el 40º aniversario del golpe de Estado sobre estas problemáticas, son indicativas de tales derivas historiográficas. Ver Gabriela ÁGUILA, Santiago GARAÑO y Pablo SCATIZZA (coords.), Represión estatal y violencia paraestatal en la historia reciente argentina: nuevos abordajes a 40 años del golpe de Estado, La Plata, Ediciones FaHCE, Universidad Nacional de La Plata, 2016, http://www.libros.fahce.unlp.edu.ar/index.php/libros/catalog/book/63

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Dossier. Actitudes sociales en relación a la última dictadura militar https://historiapolitica.com/dossiers/actitudes-sociales-dictadura/ Tue, 05 May 2015 18:31:56 +0000 http://historiapolitica.com/?post_type=dossiers&p=2943 Actitudes sociales en relación a la última dictadura militar

 

Daniel Lvovich (UNGS – CONICET)

 

En la última década, los estudios en torno a la última dictadura militar se han multiplicado, fructificando en un número muy grande de tesis, artículos y libros. Se trata a la vez de un área de conocimiento hasta hace no mucho tiempo relativamente inexplorada y de una temática fuertemente atravesada por las demandas sociales de verdad y justicia y enormemente sensible desde el punto de vista político y cultural.
A medida que las afirmaciones más generales y abstractas fueron cediendo paso – o al menos resultaron complementadas o matizadas – al producto de un gran número de investigaciones monográficas, el conocimiento del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional se tornó más complejo. Investigaciones dedicadas a la lógica económica de la dictadura o a las características de la estructura del Estado y de las Fuerzas Armadas en el período mostraron la imposibilidad de sostener la existencia de un proyecto único que trascendiera el despliegue del terrorismo de estado; los trabajos sobre la reconfiguración de la burocracia en los distintos niveles del estado demuestran marcados niveles de continuidad con períodos previos, y hasta la periodización misma que enmarca el comienzo y fin del período ha sido puesta en cuestión por aquellos que estudian el despliegue represivo en el mediano plazo y las zonas grises entre legalidad e ilegalidad.
En este contexto, nuevas preguntas han orientado a un conjunto no menor de investigaciones que han indagado menos en las conductas de los grupos dirigentes de distinto nivel que entre lo que se ha denominado la “gente corriente”, y menos en busca de totales complicidades con el régimen o resistencias absolutas, que de una gama de actitudes complejas y no pocas veces contradictorias. Con enfoques no pocas veces inspirados en estudios acerca de las sociedades europeas bajo regímenes dictatoriales -entre los que han resultado muy influyentes autores como Kershaw, Mason, Saz, Burrin, Passerini, o el propio De Felice – los estudios sobre actitudes sociales se han comenzado a desarrollar en nuestra historiografía de un modo aún incipiente, intentando reintegrar la complejidad al análisis a través de estudios que intentan integrar una multiplicidad de dimensiones y una mayor atención a las no pocas veces contradictorias motivaciones de los actores-
Este dossier se compone de siete textos que participan de este esfuerzo colectivo de comprensión de un pasado que, no por horrorosa resulta inexplicable. El de Gabriela Águila, “Violencia política, represión y actitudes sociales en la historia argentina reciente”, recorre de manera crítica la historiografía reciente sobre esos temas, señalando la necesidad de multiplicar los estudios que den cuenta de una heterogeneidad social que resiste toda simplificación o generalización excesiva.
Tres trabajos analizan el mundo de los trabajadores, a través de miradas definitivamente separadas de toda simplificación dicotómica. El de Daniel Dicósimo analiza una serie de conflictos laborales desarrollados entre 1976 y 1983, conceptualizados a partir de la compleja relación entre consentimiento y conflicto, resultado de la adaptación a las específicas condiciones de trabajo desarrolladas en aquel período de la obediencia condicionada de los trabajadores. Eleonora Bretal coteja las muy distintas percepciones sobre el pasado dictatorial de trabajadores industriales con pasados militantes en la izquierda y de aquellos que “no estaban metidos en nada”, destacándose que para estos, el establecimiento de la dictadura no significó un corte significativo, con lo que la violencia estatal y los procesos de disciplinamiento pudieron no haber significado cambios sustanciales en ciertas dimensiones de su experiencia cotidiana, más visibles y tangibles, en los lugares de trabajo y de residencia. Algunos de estos ex-obreros explicaron su postura de “no estar metidos en nada” a partir de valores propios de la cultura del trabajo como el esfuerzo, la dedicación en las actividades laborales diarias, o ganar el sustento familiar con el dinero resultado de la labor cotidiana, mientras mostraron como opuestos a los valores de la cultura del trabajo el activismo político y/o gremial. Esta modalidad de economía moral de este grupo de trabajadores resulta una explicación convincente, que se aleja de interpretaciones centradas puramente en la esfera de las afinidades y enfrentamientos exclusivamente políticos. En su contribución, fundada sobre un estado de la cuestión de la producción académica sobre los trabajadores bajo la dictadura, Victoria Basualdo critica las miradas dicotómicas que enfrentan tajantemente las posiciones de resistencia y de pasividad, que suelen además vincular esos términos con los de oposición política a la dictadura, en el primer caso, y con indiferencia o incluso apoyo, en el segundo. Sostiene en cambio que, coexistieron a lo largo del período la inmovilidad y el movimiento de la clase trabajadora, que asumieron distintos significados y que fueron variando a lo largo del período, de acuerdo con los contextos geográficos y con las concepciones de cada sector de la clase trabajadora.
En “Las fuentes de oposición exiliar y el estudio de las actitudes sociales durante el último gobierno militar (1976-1979)”, Silvina Jensen explorara las potencialidades de las fuentes producidas en el exilio para abordar las relaciones entre régimen castrense y sociedad civil entre el golpe de estado de marzo de 1976 y la visita a la Argentina de la Comisión Interamericana de Derechos Humanas de la OEA en septiembre de 1979, a través del examen de los modos en que dos organizaciones – CADHU y COSOFAM – consideraron las mencionadas relaciones entre régimen castrense y sociedad civil en aquellos años.
También referida a la temática exilar, la contribución de Marina Franco en “Algunas reflexiones en torno al acto de exilio en el pasado reciente argentino” presenta una interpretación acerca de los sentidos que acarrea la consideración de los exiliados como víctimas puras. La autora presenta en contraste una concepción que los postula como actores que contaron con un margen de acción que – aunque restringido –les devuelve a los fines analíticos la capacidad de agencia, y poder pensar por tanto que el exilio fue una actitud posible frente a la dictadura y no una imposición ineludible.
Por último, Luciano Alonso recurre en “Defensa de los derechos humanos frente a las dictaduras regresivas. Los casos de Argentina y Uruguay en perspectiva comparada” a dicha estrategia para comprender la especificidad de esas organizaciones en cada caso nacional, a través de un ejercicio de sociología histórica en el que las claves de índole política, las referidas a los regímenes de violencia y a las escalas geográficas y demográficas resultan las variables explicativas fundamentales.

 

Textos

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